¿Recuerdan que empezando el año hice mi ridícula semana de fotografía, exclusivamente para compartirles mi descubrimiento de una soberbia fotógrafa michoacana? Pues bien, ahora ella vuelve a ser el centro de atención de el conglomerado bloguero de Caósmico (alias yo), pues resulta que hoy hace 19 veranos la señorita Zoe daba sus primeras muestras de arte con un performance irrepetible llamado nacimiento.
Para darle estructura a esta felicitación realicé en "El Espacio y la Industria en Spaces" la pregunta de si debemos estar felices (alegres dije) por el cumpleaños de la cumpleañera. Pensémoslo.
Ser sentido o no ser sentido de felicidad y alegría... Ese es el problema, Zoe cumple años y nosotros no sabemos si tiene sentido decir FELICIDADES. Y yo irracionalmente digo que lo hago precisamente porque no lo tiene (solo cito a Cioran para que los que lo necesiten me crean: "El hecho de que la vida no tenga ningún sentido es una razón para vivir, la única en realidad"). ¿Qué importa si me importa? Solo por buscarle razón a la pregunta de si uno debe ser feliz porque se da cuenta de que ha pasado un año más vale la pena decirlo, para que el que no lo crea axiomáticamente lo labure durante toda una vida.
¡FELICIDADES, ZOE! ¡Por que todos los años veas que ser feliz es una cuestión de gustos y no de razones! ¡SALUD! [Brindo con jugo de manzana, pero que diablos].
1 comentario:
Clické y clické hasta que llegué a tí, pero no tuve malos resultados :). Buen blog, y gustos musicales también.
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